Dos fincas bananeras de productores independientes en Sixaola, Talamanca, Limón, se declararon en quiebra.
Sus propietarios argumentaron que no fue posible recuperarse de los estragos causados por las inundaciones que afectaron la vertiente del Caribe en enero.
Las compañías Tanagra S. A. y Bribri S. A. comunicaron el cierre de operaciones, lo que deja a unos 600 trabajadores sin empleo.
Las dos fincas exportaban, en promedio, 430.000 cajas de fruta (de 18,14 kilos) al año, lo que representaba divisas por unos $2,5 millones (¢1.155 millones).El área cultivada en ambas plantaciones es de 338 hectáreas.
El ministro de Trabajo, Fernando Trejos, confirmó la quiebra de las fincas y agregó que los productores le manifestaron la imposibilidad de hacer frente al pago de prestaciones laborales.
Trejos explicó que los dueños de Tanagra y Bribri dijeron que tampoco tienen el capital para rehabilitar las fincas.
El costo de recuperar una plantación es, en promedio, de $7.000 por hectárea, por lo que la inversión para ambas fincas sería de $2,3 millones (¢1.062 millones).
Por su parte, el presidente, Abel Pacheco, dijo ayer que el Gobierno no tiene dinero en estos momentos para enfrentar ese tipo de emergencias. Insistió en que una solución sería la aprobación del plan fiscal.
El problema se agudizó por la falta de apoyo financiero del Gobierno, aseguró Luis Umaña, vicepresidente de la Cámara Nacional de Productores Independientes de Banano (Anaproban).
Agregó: ?La mayoría de estas plantaciones estaban en dificultades desde antes de las inundaciones. La destrucción por el agua aumentó la crisis que afrontaban?.
Según Umaña, en los próximos días podrían unirse otras fincas que sufrieron graves daños con la llena, aunque prefirió no identificar esas compañías.
El 2 de febrero La Nación informó de que cinco fincas bananeras de productores independientes de esa zona pidieron al Ministerio de Trabajo la suspensión de los contratos laborales.
La solicitud se presentó en vista de que las empresas no podían hacer frente al pago de salarios pues resultaron totalmente dañadas por las inundaciones entre el 7 y el 21 de enero.Entre las empresas solicitantes estaban Tanagra y Bribri.
Las pérdidas por inundaciones en fincas bananeras del Caribe ascendieron a $31 millones.
David Leal C.
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